Hace tan solo un año, la Asociación inició un programa de intervención sociocomunitaria para acercar sus servicios gratuitos a las zonas rurales de Galicia. Se trataban de los Clubs de Salud, una iniciativa destinada a fomentar el bienestar físico, social y emocional de los pacientes y familiares de los entornos rurales de la provincia. Su éxito hizo que se consolidasen en As Pontes de García Rodríguez, Cedeira, Cee, Curtis-Teixeiro, Melide, Rianxo y Vimianzo. Además de estas siete localidades, también se organizaron Clubs de Salud satélites en Coristanco y Boimorto, que empezaron su actividad el 25 y 30 de septiembre, respectivamente.

En estos clubs satélites se realizan talleres quincenales en los que se abordan temas variados como alimentación saludable, ejercicio físico, higiene del sueño, gestión y autocuidado emocional y abordaje de miedos. Además, también se llevan a cabo actividades culturales y de ocio en grupo. “Los clubs satélites se realizan en localidades con una menor población a la que también queremos llegar”, indica Lourdes Silvoso, coordinadora provincial de Atención al Paciente y Usuario de la Asociación. “La acogida ha sido muy buena, tanto en Boimorto como en Coristanco. Nos han derivado participantes desde los Servicios Sociales del Ayuntamiento y desde los centros de salud, y también se han sumado muchas personas gracias a nuestros voluntarios en las Juntas Locales”.

Añade que “los grupos son muy heterogéneos, formados tanto por pacientes como por familiares. Esto nos ayuda a conocer las necesidades que hay en estas poblaciones para poder responder de forma más cercana y eficaz”.

Rocío García de la Barga, responsable de coordinación territorial en la Junta Provincial, subraya la buena acogida de pacientes, centros de salud y ayuntamientos. “Han colaborado mucho para que todas las personas que puedan necesitarlo accedan a las actividades. Las opiniones que estamos recibiendo de los participantes son muy positivas, destacan que la experiencia está siendo muy enriquecedora y que están adquiriendo muchos consejos muy útiles sobre salud, emociones y la importancia de mantener unas relaciones sociales sanas”.

Además de mejorar la salud en estas tres vertientes —física, social y emocional—, el proyecto “también tiene un objetivo secundario que se centra en la equidad. Defendemos que cualquier persona en cualquier lugar debe tener acceso a servicios y recursos”. Rocío García de La Barga también resalta la labor del voluntariado de las Juntas Locales para impulsar los Clubs. “No es lo mismo ver un cartel en una pared que alguien que conoces y confías te explique la actividad y sus beneficios. Nuestros voluntarios van todos los días a los talleres para apoyar a los monitores y para que los participantes entiendan que tienen una red de ayuda muy cercana y personas preocupadas por ellos”.

La presidenta de la Junta Local de Coristanco, Maricarmen Facal, indica que todos están muy contentos con los resultados. “Los participantes se encuentran a gusto, hablan unos con otros y se olvidan en ese momento de la enfermedad. Les está ayudando mucho a nivel emocional”. Ante su impacto positivo, la voluntaria comparte que ” los pacientes necesitan un lugar como este, donde se relajen, en el que se olviden un poco de sus problemas y aprendan hábitos de vida saludable”.