Redirección del sistema inmune para luchar contra el cáncer de mama
Nuestra propuesta busca mejorar la seguridad y la eficacia de una terapia innovadora para tratar el cáncer en aquellos pacientes que presentan altos niveles de la proteína HER2. Aunque esta proteína se encuentra en tejidos sanos en cantidades reducidas, su sobreproducción causa aproximadamente un 4 % de todos los cánceres y 20% de los de mama y gástricos.
Previamente, hemos modificado linfocitos T de pacientes oncológicos para que ataquen sus células tumorales, una tecnología llamada "células CAR T". Utilizando estas células junto a anticuerpos que refuerzan la actividad de los linfocitos T al reconocer la proteína HER2, hemos mejorado la respuesta inmune antitumoral del paciente, creando una terapia nueva que ataca a los tumores y minimiza la posibilidad de recaídas. Sin embargo, observamos algunos efectos secundarios potencialmente tóxicos para los tejidos sanos.
Nuestro actual objetivo es reducir estos efectos adversos, ajustando la capacidad de nuestras CAR Ts para reconocer a la proteína HER2 únicamente en células tumorales, evitando así una respuesta autoinmune y manteniendo la eficacia terapéutica. Para ello, modificaremos los anticuerpos activadores para disminuir su afinidad por la proteína HER2, reduciendo los efectos tóxicos no deseados. Nuestro plan se divide en tres fases:
1. Analizar el funcionamiento de nuestra terapia y su funcionamiento en el laboratorio sobre células en cultivo.
2. Probar la seguridad y eficacia de nuestra terapia en modelos de ratones con tumores derivados de células de cáncer de mama.
3. Evaluar el efecto terapéutico en modelos de ratones con tumores derivados directamente de pacientes.