Sarcoma de tejidos blandos: esperanza de vida

La esperanza de vida de los sarcomas de tejidos blandos depende del tipo de sarcoma, sus características histológicas, la extensión, si es posible la extirpación completa del mismo y la respuesta a los tratamientos.

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Pronóstico del sarcoma de partes blandas

Las tasas de supervivencia ofrecen una idea del porcentaje de personas con el mismo tipo y etapa de cáncer que permanecen vivas durante un tiempo determinado (generalmente 5 años) desde el diagnóstico. Estas tasas no son indicativas del tiempo de supervivencia de un paciente concreto. Sirven para comparar la eficacia de los tratamientos y tener una idea general de la evolución de la enfermedad en el conjunto global de pacientes.

Según datos del National Cancer Institute de Estados Unidos, la supervivencia global de los sarcomas de tejidos blandos a 5 años es del 64,9 %, teniendo en cuenta el periodo 2009-2015. En los localizados puede llegar al 81,2 %, siendo menor en estadios más avanzados (57,4 % en extensión regional y del 15,9% en los que presentan diseminación a distancia). 

 

Factores del pronóstico

Según la SEOM, globalmente el 50 % de los sarcomas de partes blandas consiguen la curación. Hay algunos factores a tener en cuenta para determinar el pronóstico:  

  • Grado histológico: Es el factor más importante. Los sarcomas de partes blandas de bajo riesgo pueden tener una supervivencia a 5 años del 75 %.
  • Tamaño tumoral: Los tumores mayores de 5 cm tienen peor pronóstico que los más pequeños.
  • Tipo de sarcoma: No todos los sarcomas poseen el mismo comportamiento.
  • Localización: Cuando se sitúan profundamente existe más riesgo de desarrollar metástasis, además va a condicionar la posibilidad de que puedan o no, ser extirpados completamente con la cirugía, por lo que los tumores situados en las extremidades suelen poder ser extirpados completamente.
  • Las recidivas (reaparición del tumor), tienen peor pronóstico que los de primer diagnóstico.

Estadios del sarcoma de tejidos blandos

Según la clasificación UICC/AJCC 2002 (6ª edición), en los sarcomas de partes blandas se incorpora el grado a la clasificación histológica. Se clasifican en estadios del I al III según factores pronósticos (grado de malignidad, tamaño tumoral y profundidad).

Clasificación TNM

La clasificación TNM tiene en cuenta el tamaño del tumor primario (T), la existencia de ganglios afectos (N) y si existen metástasis (M). Según esta clasificación tendremos:

T (Tumor)

  • TX Tumor primario no localizado
  • T0 No evidencia de tumor primario
  • T1 Tumor 5.0 cm o menor (a: superficial; b: profundo)
  • T2 Tumor mayor 5.0 cm (a: superficial; b: profundo)

N (Ganglios)

  • NX Ganglios linfáticos regionales no localizados
  • N0 No afectación ganglionar
  • N1 Afectación ganglios regionales

M (Metástasis)

  • MX No se puede demostrar la existencia de metástasis a distancia
  • M0 No metástasis a distancia
  • M1 metástasis a distancia

Clasificación de los estadíos

Combinando la clasificación TNM y el grado histológico, los sarcomas de partes blandas puede clasificarse en distintos estadios:

  • Estadío I (Bajo grado): IA G1-2, T1a-b, N0, M0; IB: G1-2, T2a-b, N0, M0
  • Estadío II (Alto grado): IIA: G3-4, T1a-b, N0, M0; IIB: G3-4, T2a, N0, M0
  • Estadío III (Alto grado): III: G3-4, T2b, N0, M0
  • Estadío IV (Cualquier grado): cualquier G, cualquier T, N1, y/o M1

Podríamos resumir de esta forma muy abreviadamente:

  • Estadio I: son tumores de bajo grado.
  • Estadio II: son tumores de alto grado, generalmente superficiales.
  • Estadio III: son tumores grandes, de alto grado y generalmente más profundos.
  • Estadio IV: son tumores que se han extendido lejos, por ejemplo que han originado metástasis en los ganglios o en otros órganos.   

Recomendaciones

A grandes rasgos, es importante conocer si el tumor está localizado o ha producido metástasis a distancia. Las metástasis más frecuentes son las pulmonares, aunque en los sarcomas de localización dentro del abdomen pueden ser las hepáticas. La afectación ganglionar no es tan frecuente en estos tumores como en otros cánceres, aunque puede aparecer en algunos tipos.