Tratamientos para dejar de fumar

Según el Código Europeo Contra el Cáncer, el tabaco es la principal causa de cáncer y de enfermedades y muertes evitables en el mundo. Fumar es la forma más dañina de consumir tabaco y la que genera la mayor carga de enfermedades relacionadas con el tabaco. El consumo de cigarrillos mata a más de la mitad de los usuarios a largo plazo. Solo en el año 2020 murieron unos 8 millones de personas en el mundo a causa del tabaco, y unas 50.000 en España.

Tratamientos para dejar de fumar

 

¿Qué efectos tiene el tabaco en la salud?
 

No existe ninguna manera segura de consumir tabaco, pero la evidencia científica indica que fumar es la más peligrosa, pues el mayor riesgo de cáncer procede de la combustión o del humo del tabaco. Esto es porque la mayoría de las sustancias tóxicas, incluidas las que causan cáncer (“carcinógenos”), se generan durante la combustión. Está estudiado que el tabaco produce distintos tipos de cáncer, especialmente si se fuma. Pero también el humo del tabaco produce cáncer a los no fumadores que lo inhalan y a los hijos e hijas de personas fumadoras.

Fumar produce en Europa el 82% de los casos de cáncer de pulmón. Es más, el riesgo de cáncer de pulmón es entre 20 y 25 veces superior entre fumadores que entre no fumadores. También tienen más riesgo cuantos más años se lleva fumando, cuantos más cigarrillos diarios se fuman y cuanto más joven se empieza a fumar. Otros cánceres que puede causar el tabaco son: vejiga, esófago, de boca, garganta, hígado y vesícula biliar, estómago, nasofaringe, colon y recto, ovario, cérvix o cuello uterino, páncreas, cavidad nasal, riñón y pelvis renal o sangre (leucemia mieloide aguda).

Según la Encuesta Europea de Salud en España del año 2020, un 19,8% de la población de 15 o más años eran fumadores diarios. En mayor medida los hombres (23,3%) que las mujeres (16,4%). En relación con la edad, los porcentajes más elevados de fumadores diarios corresponden a los grupos de edad de 25 a 34 años (26,3%) y de 50 a 64 años (24,6%). 

Cabe destacar que el número de fumadores en España está bajando en los últimos años. De hecho, en la última Encuesta de Salud de 2017 el porcentaje de fumadores diarios fue del 22,1%, aunque todavía estamos lejos de los objetivos del Plan de Cáncer europeo (2021) que pretende lograr una Generación Libre del Tabaco para 2040 donde menos del 5% de la población fume. 

Por todos los efectos que produce fumar sobre la salud, si eres fumador o fumadora y quieres dejar de fumar, quizás podrías plantearte algunos de estos tratamientos o terapias que te presentamos a continuación.  

 ¿Qué tratamientos existen para dejar de fumar? 

No hay una única manera correcta para dejar de fumar, pero sí existen diferentes tratamientos que pueden ayudarte a abandonar este hábito. Desde la asociación, te recomendamos los siguientes tratamientos para dejar de fumar y te presentamos en qué consisten, cuáles son las ventajas, qué eficacia tienen y también los inconvenientes.

APPs para dejar de fumar 

La tecnología se ha convertido en una poderosa aliada en la batalla contra el hábito de fumar gracias al desarrollo de aplicaciones y dispositivos de ayuda. Existen numerosas aplicaciones de autoayuda que dan a los fumadores prácticas para lograr y mantener la abstinencia de fumar, como por ejemplo Respirapp.

  • ¿Cómo funciona? Se desarrollan aplicaciones informáticas de apoyo para dejar de fumar con información, consejos y pautas.
  • Ventajas. La ventaja más importante de estos métodos es la posibilidad de acceder al tratamiento a cualquier hora y en cualquier momento. Además, suelen ser dinámicos, contando con mini juegos o distracciones, además de opciones personalizadas.
  • Eficacia. Debido a lo reciente de estas técnicas no existen amplios estudios de evaluación. Las tasas de éxito que se barajan oscilan entre un 10% a un 22% de abstinencia al año de finalizar el programa. 
  • Inconvenientes. Pese a contener consejos, recomendaciones y ayudas, nunca podrán sustituir la labor presencial de un profesional especializado.

 

Respirapp, aplicación para dejar de fumar

Los tres fármacos principales son: bupropión, vareniclina y la terapia sustitutiva con nicotina. No hay evidencia concluyente sobre qué fármaco se debe utilizar o qué tipo de fumador responde mejor a uno u otro, por lo que la elección del tratamiento debe ser individualizada en función de las características de los pacientes y las contraindicaciones de los fármacos.

Desde 2020 el bupropión y la vareniclina están financiados por el Sistema Nacional de Salud. Ante cualquier duda, consulta a tu médico de referencia. En el momento de publicación de este contenido, la vareniclina, también conocida por su nombre comercial “Champix”, se encuentra eliminada del mercado español de manera indefinida por la AEMPS (Agencia Española del Medicamento). No se prescribirá en nuevos tratamientos, y en aquellos en curso antes de la noticia, se recomienda contactar con el profesional de medicina prescriptor.

Bupropión

Es el primer medicamento que, sin estar compuesto por nicotina, ha demostrado su eficacia a la hora de dejar de fumar.

  • ¿Cómo funciona? Se trata de un antidepresivo que actúa sobre las estructuras cerebrales donde se produce la adicción, consiguiendo reducir los síntomas del síndrome de abstinencia y el deseo de fumar. Se presenta en forma de comprimidos y generalmente los pacientes deberían dejar de fumar durante la segunda semana de tratamiento . 
  • Ventajas. Es eficaz tanto en fumadores con baja-moderada dependencia como en los de alta dependencia física a la nicotina. Está indicado en el tratamiento de fumadores con antecedentes de depresión y de alcoholismo.
  • Eficacia. Los resultados del tratamiento con bupropión demuestran que el 40% de las personas que han conseguido dejar de fumar siguen sin fumar a los 12 meses después de finalizado el tratamiento.
  • Efectos secundarios y contraindicaciones. Hay que tener en cuenta que el bupropión es un medicamento y, como tal, presenta efectos secundarios y contraindicaciones importantes. Por este motivo sólo debe utilizarse bajo prescripción médica.

Vareniclina

Es un medicamento desarrollado específicamente para ayudar a las personas que deseen dejar de fumar. Básicamente actúa reduciendo el efecto de la nicotina en el cerebro y reduciendo la ansiedad causada por el síndrome de abstinencia.

  • ¿Cómo funciona? La vareniclina actúa bloqueando los efectos placenteros de la nicotina en el cerebro. Se presenta en forma de comprimidos y la duración del tratamiento inicialmente recomendada es de 12 semanas. 
  • Eficacia. A los 12 meses tras el tratamiento un 40% de las personas que han dejado de fumar siguen sin hacerlo. 
  • Efectos secundarios y contraindicaciones. Hay que tener en cuenta que es un medicamento, y como tal presenta efectos secundarios y contraindicaciones importantes. Por este motivo sólo debe utilizarse bajo prescripción médica.
     

La vareniclina se vende bajo la marca comercial de CHAMPIX (del laboratorio Pfizer) y es el medicamento más utilizado para dejar de fumar en España. Se da la circunstancia de que desde mediados de 2021 se retiró del mercado, indefinidamente, tras la detección en las pastillas de nitrosaminas, unos compuestos potencialmente cancerígenos.

La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) recomienda que no se inicien nuevos tratamientos con CHAMPIX, ya que no se puede garantizar su continuidad. Para los pacientes que ya estén en tratamiento y que no puedan completarlo por el problema de suministro, se recomienda que se dirijan a su médico para que valore el cambio a otro medicamento. 

Terapia sustitutiva con nicotina

Consiste en la administración de nicotina a los fumadores que quieren dejar de fumar por una vía diferente a la del consumo de tabaco. Estos productos no contienen muchas de las toxinas que se encuentran en el humo. El objetivo del tratamiento es disminuir las ansias y aliviar los síntomas de la abstinencia de nicotina.

  • ¿Cómo funciona? Cuando fumas, la nicotina se absorbe en la boca y pulmones, pasa a la sangre y en unos 10 segundos llega al cerebro donde actúa en los receptores nicotínicos. La terapia sustitutiva con nicotina actúa de forma similar. 
    La administración de nicotina sin tabaco llega por el aparato circulatorio al cerebro, disminuyendo el deseo de fumar y los síntomas del síndrome de abstinencia. La diferencia está en que no se produce adicción ni dependencia de la nicotina porque su concentración en sangre es menor que en el caso de los cigarrillos. 
    Los sustitutivos de nicotina pueden utilizarse por vía transdérmica (parches), oral (chicles o caramelos), intranasal (espray nasal) o inhalatoria (inhalador de nicotina) con un periodo de duración de 2 a 3 meses.
  • Ventajas. Reduce los síntomas del síndrome de abstinencia. Es un tratamiento muy recomendado para fumadores con moderada y alta dependencia física de la nicotina.
  • Eficacia. Los estudios demuestran que es un método fiable para dejar de fumar. El 30% o 40% de los casos que han conseguido abandonar el hábito sigue sin fumar a los 12 meses una vez finalizado el tratamiento.
  • Efectos secundarios y contraindicaciones. En España estos productos se comercializan a través de las farmacias y no precisan receta médica. Aunque estos fármacos son muy seguros te aconsejamos que sea un médico quien supervise su utilización. 
    Pueden aparecer efectos secundarios leves y de corta duración (insomnio, irritación nasal o de garganta) que deben ser controlados. Consultar al médico.
    Las contraindicaciones para el empleo de este fármaco son:
  • Personas que hayan sufrido un infarto de miocardio reciente.
  • Fumadores con arritmias cardíacas severas.
  • Personas con angina de pecho inestable.
  • Mujeres embarazadas y durante el periodo de lactancia.
  • Personas con úlcera gastroduodenal activa.
  • Hay que tener en cuenta que en ocasiones puede no producirse el efecto deseado por el uso inadecuado de estos medicamentos. No se debe fumar con los parches, ya que se incrementa el nivel de nicotina y es un peligro potencial. 

Otros tratamientos

Existen otros medicamentos que pueden ayudar cuando los otros tratamientos mencionados no han funcionado. Hay que tener en cuenta que sus beneficios son menores.

  • La clonidina normalmente se usa para tratar la hipertensión arterial. Puede ayudar cuando se inicia antes de dejar el tabaco. Este medicamento se presenta como pastilla o parche.
  • La nortriptilina es otro antidepresivo. Se inicia de 10 a 28 días antes de dejar de fumar.
  • La citisina actúa de manera similar a la vareniclina. Reduce la sensación de gratificación y los síntomas de abstinencia. Esta contraindicada en varias patologías cardíacas. 
  • Estimulación magnética transcraneal. Es una estrategia novedosa que consiste en una intervención fisiológica no invasiva que utiliza campos magnéticos para estimular la actividad de las células nerviosas en áreas focalizadas del cerebro. 
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