¿Qué es una adenopatía?

El término adenopatía se utiliza en medicina para identificar una situación en la que se encuentra una alteración (generalmente es cuando hay un crecimiento anormal) en un ganglio linfático.

¿Qué son los ganglios linfáticos?

Nuestro cuerpo está surcado por una red de vasos sanguíneos (arteriales y venosos) y vasos linfáticos. Estos últimos recogen el líquido linfático, encargado de trasladar desechos de los tejidos a la sangre, además de algunas de las células del sistema inmunológico del cuerpo, ya que forma parte de las estructuras de nuestro sistema inmune.

Esta red de vasos linfáticos se conecta por medio de unos “colectores” que son los ganglios linfáticos. Son estructuras redondeadas que acumulan linfa y que permiten que los linfocitos de tipo T y B (células de defensa del sistema inmunológico) puedan madurar y adquirir su capacidad de respuesta frente a agresiones externas de tipo infeccioso (virus y bacterias, por ejemplo). 

Los ganglios linfáticos, junto con el bazo, el timo, y la médula ósea forman las estructuras que permiten la creación y desarrollo de las células y son componentes del sistema inmunológico.

Generalmente son de pequeño tamaño (menores de un centímetro)  y se agrupan en diferentes zonas de nuestro cuerpo, como las axilas, las ingles, en el cuello, zonas donde a veces se pueden palpar o ver, sobre todo cuando aumentan de tamaño y/o duelen. Es entonces cuando las personas pueden notar una alteración y acuden al médico.

¿Qué ocurre cuando aparece una adenopatía

Es frecuente que en algún momento de la vida las personas se noten algún ganglio aumentado  de tamaño y/o doloroso. 

La mayor parte de las veces, la causa es el aumento de células inflamatorias en el ganglio, como respuesta a una infección (esto ocurre, por ejemplo, en la Mononucleosis infecciosa en que crecen los ganglios en la parte posterior del cuello), o  por una enfermedad de tipo inmune. 

Según sean: la edad de la persona, posible existencia de síntomas infecciosos, tiempo de aparición, consistencia del nódulo que se palpa y evolución, el médico indicará la necesidad de control, de realizar analíticas u otras pruebas, y de tratamiento. 

En algunos casos, según sea el tamaño y evolución del ganglio detectado, así como la sintomatología o problemas de salud que pueda presentar la persona, es posible que el médico sospeche que la causa de la afectación pueda ser un proceso maligno. 

En ocasiones el término adenopatía aparece en un informe de alguna prueba o en la Historia Clínica de un paciente.  

¿Cuál puede ser la causa de una adenopatía?

La persona no tiene por qué haber notado nada.  Generalmente la palabra se usa para informar de un aparente crecimiento o alteración de la normalidad de algún ganglio o grupo de ganglios, con frecuencia localizados en el interior del cuerpo. 

Habitualmente es un hallazgo encontrado al realizar una prueba (generalmente una prueba de imagen, TAC, ecogafía, etc.) en un paciente al que están estudiando por sospecha de enfermedad maligna, o bien ya diagnosticado de un cáncer en un órgano cercano. 

Puede ser una consecuencia de la afectación por un cáncer.  Esto puede ocurrir, por ejemplo, en el caso de la existencia de un cáncer en la mama, que puede haberse extendido por los vasos linfáticos hasta la zona de los ganglios linfáticos más cercano, que se encuentran en la región de la axila. 

Cuando esto ocurre y hay un diagnóstico de enfermedad oncológica, la existencia de adenopatías se suele expresar dentro del estadiaje (según la clasificación internacional TNM) como N (afectación de nódulos linfáticos), o también se expresa como metástasis linfáticas.