¿Qué es la metástasis?

El término metástasis se utiliza en medicina para identificar una situación en la que se encuentra una alteración (generalmente cuando hay un crecimiento anormal de células, que se han detectado por alguna prueba) en un órgano o tejido del cuerpo que es diferente del órgano en el que se ha originado un cáncer.

¿Cómo se diagnostica la metástasis?

En ocasiones el término metástasis aparece en un informe de alguna prueba o en la Historia Clínica de un paciente.  
Generalmente la palabra se usa para informar de un aparente crecimiento celular anómalo, en forma de nódulo o cambio en la forma, tamaño o consistencia habitual de un tejido, órgano o hueso del cuerpo de una persona. 

  • Habitualmente es un hallazgo encontrado al realizar diversas pruebas (generalmente pruebas de imagen: TAC, ecografía,… etc.) realizadas para revisar a un paciente ya diagnosticado de un cáncer en un órgano concreto. 
  • También puede a veces ser un descubrimiento casual al estudiar a una persona en la que se sospecha la existencia de una enfermedad maligna u otra enfermedad.

Cuando esto ocurre con un diagnóstico de enfermedad oncológica, la existencia de metástasis se suele notificar en los informes dentro del estadiaje de cada tipo de cáncer (según la clasificación internacional TNM) como M (afectación metastásica o a distancia).

Hay que recordar que

  • Metástasis es una palabra que indica que la enfermedad oncológica se ha extendido fuera del foco en que se originó. Sus médicos, tras estudiar al paciente y su historial, le explicarán cómo le puede afectar. 
  • La existencia de metástasis indica que la enfermedad está en fase diseminada, y es poco probable conseguir la eliminación definitiva del cáncer
  • La aparición de metástasis NO significa “no hay nada que hacer”
  • El especialista indicará las opciones de tratamiento posible según sea: el tipo de tumor, número de metástasis, el tamaño que tengan y la zona donde se encuentren
  • Con frecuencia se necesitará aplicar un tratamiento sistémico: con fármacos que lleguen a todas las zonas del cuerpo (quimioterapia, inmunoterapia, …), para intentar frenar el avance de la enfermedad
  • Dependiendo de cada caso, también es posible a veces utilizar otros tratamientos locales (radioterapia y/o quimioterapia) como alternativas de tratamiento o como complemento
  • Según sea la evolución y respuesta a las terapias, la enfermedad con frecuencia se puede estabilizar, al menos durante un tiempo 
  • Tener metástasis NO es siempre sinónimo de “muerte y sufrimiento inmediato”; al contrario, hay muchas personas que pueden hacer vida “normal” o casi, durante la mayor parte del proceso de enfermedad.